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Un Mundo Sin Mordaza (23/04/2010).- (Paco Audije) La Federación Internacional de Periodistas (FIP), y su grupo regional, la Federación de Periodistas de América Latina y el Caribe (FEPALC) han expresado su máxima alarma por los asesinatos de periodistas de los últimos días, que han tenido lugar en distintos países latinoamericanos.

Máxima alarma de la FIP después de que tres periodistas hayan sido asesinados en Honduras, México y Colombia

El último de estos crímenes tuvo lugar en San Pedro de Sula (Honduras) el pasado martes día 20. La víctima fue Jorge Georgino Orellana, quien recibió un disparo cuando abandonaba Televisión de Honduras, canal en el que dirigía el programa de debates “En vivo con Georgino”.

“Honduras se ha convertido, en un plazo de pocas semanas, en el país más peligroso para el ejercicio de la profesión de periodista”, ha declarado Gregorio Salazar, director de la Oficina de la FIP para América Latina.

Por su parte, Celso Schroeder, presidente de la FEPALC, ha señalado: “Para la FEPALC llama la atención la celeridad con que la investigación policial descarta, y no sólo en este caso de Honduras, que estos asesinatos tengan que ver con el ejercicio del periodismo”.

En el mismo sentido, Zuliana Láinez, Secretaria de FEPALC para los Derechos Humanos, ha declarado: “Esa precipitación de los investigadores y la terrible frecuencia de estos crímenes prueban que las conclusiones y argumentos policiales no pueden aceptarse sin más. Pedimos una investigación a fondo y auténtica”.

En un comunicado,”la FEPALC recuerda que otros cinco periodistas fueron asesinados en marzo en la peor escalada de ataques de este tipo en Honduras: José Bayardo Mairena Ramírez y Manuel de Jesús Juárez, comunicadores de Canal 4 y Radio Excélsior de Juticalpa, Olancho (26 de marzo); Nahúm Palacios Arteaga, periodista, asesinado en Tocoa el 14 de marzo; David Meza, reportero radiofónico, asesinado el 11 de marzo en La Ceiba; y Joseph Hernández Ochoa, presentador de televisión, asesinado a balazos el 1 de marzo en Tegucigalpa en un atentado en el que una colega suya, también periodista, resultó gravemente herida.

A lo acontecido en Honduras, la FEPALC suma su enérgico grito de no a la impunidad a los crímenes contra la periodista María Isabela Cordero, ex conductora de la cadena Televisa, en Chihuahua, en México y del reportero gráfico Arsenio Zambrano Ocampo, en Colombia”.

Se da la circunstancia de que la periodista mexicana María Isabella Cordero, quien ahora trabajaba para la Cámara de Comercio de su ciudad, fue acribillada a balazos junto a otra joven amiga suya.

Por su lado, la Federación Colombiana de Periodistas (FECOLPER) señaló que hace pocos días Arsenio Zambrano “fue encontrado amarrado de pies y manos, y con varias heridas mortales producidas con arma blanca”. Según la misma fuente, los presuntos autores del crimen habrían sido detenidos; pero la impunidad predomina en la mayor parte de los asesinatos de periodistas en América Latina.

“Ante tan dramática situación –señala en su nota la FEPALC- demanda a los Estados hondureño, mexicano y colombiano que tomen medidas certeras que garanticen la vida y seguridad de los periodistas. Es terrible que -a la fecha- a consecuencia de la indiferencia y la ineficacia de los gobiernos sólo sumemos víctimas, una tras otra, sin que sea posible identificar a los culpables”.

Fuente: Máxima alarma de la FIP después de que tres periodistas hayan sido asesinados en Honduras, México y Colombia

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